Por CARLOS ROMERO

Se dice que el Sindicato del ISSSTESON (SUEIsssteson) encabezado por Manuel Moreno Quijada, está tratando de jugar una carta sumamente riesgosa, al exigir al instituto, el cumplimiento de mil y una cosa que no suenan lógicas ni coherentes en la realidad actual que vive el Instituto de la Salud de los Trabajadores del Estado.

Y mientras por un lado la dirigencia sindical llegaba al Hospital Ignacio Chávez, a «exigir» -si es que se puede exigir algo que de antemano se sabe que no se puede cumplir- la atención mediática se centraba en la postura del director del ISSSTESON, Pedro Angel Contreras López.

El mensaje del funcionario no podía ser más elocuente, dando cifras y datos de todo lo que ha recibido el sindicato, desde que se  firmó el compromiso laboral, a finales del mes de septiembre.

Habla de más de 7 millones de pesos en prestaciones y la creación de bases para médicos, créditos hipotecarios, becas para los hijos de los trabajadores, más de 4 millones de pesos en pagos de primas de seguro y financieras pagadas la gremio.

Contreras López desmenuza que el ISSSTESON ha prestado la facilidad para que el sindicato haga viajes y torneos playeros para sus agremiados.

«Lamento la intencionalidad política del dirigente Manuel Moreno Quijada… repruebo enérgicamente el ingreso sin autorización y de manera protagónica el ingreso al Hospital Chávez, alterando la rutina de trabajo e interrumpiendo las labores de nuestros doctores y enfermeras… violentando el derecho a la salud y privacidad de los pacientes… se tomarán las medidas correspondientes….», advirtió palabras más o menos el funcionario.

Y ¿qué sucede?, que el ISSSTESON se encuentra en una etapa de planeación, dentro de los problemas que tiene una institución en crisis por diversos temas, pero se encuentra trabajando, brindando el servicio, tratando de conseguir los medicamentos para su pacientes y varios etcéteras que el Sindicato no ve, o no quiere ver.

Y quién sabe si las exigencias sindicales estén consensuadas con sus agremiados.

Se lo digo porque en charla informal pero nutritiva con algunos trabajadores del ISSSTESON, revelan que no existe una coincidencia con el dirigente sindical y sus peticiones, porque simplemente están conscientes de que lo que se les ofreció en septiembre, se les ha venido cumpliendo.

Se le abre pues al SUEISSSTESON, una fisura que lo coloca en la sala de espera para cirugía, hoy por lo pronto, no en urgencias, pero ante lo dicho por el director del instituto, el sindicato tiene que andar con pies de plomo.

—-LA GOBERNADORA CLAUDIA PAVLOVICH VISITÓ AYER EN LA CAPITAL DEL PAÍS, A QUEN SERÁ EL PRÓXIMO SECRETARIO DE COMUNICACIONES Y TRANSPORTES, Javier Jiménez Espriu, para pedirle que el gobierno que está por entrar, concluya obras de infraestructura como la carretera 15, la de 4 carriles.

A pesar del compromiso de Enrique Peña Nieto, de concluirla y entregarla el 1 de diciembre, lo sabemos todos, eso no sucederá.

La crítica de Claudia hacia el estado de la carretera y las condiciones y peligros que reviste, ha sido insistente y directa.

Las condiciones de la 4 carriles ha sido un factor de división del gobierno estatal, que exige las mejoras con urgencia, y el Gobierno Federal de Peña Nieto, que veía a Sonora como el estado lejano al que nunca le puso la atención requerida… y el que políticamente y también hay que decirlo, nunca le favoreció.

Para la entidad nada puede ser peor que el gobierno que ya se va.

Por ello, lo mejor que puede hacer la gobernadora es lo que está haciendo: ir a negociar y a acordar con los que están por llegar, un gobierno Federal que de entrada está mostrando interés en la entidad, con un presidente electo que ya vino y fue recibido en el Palacio de Gobierno, pero que también ha invitado a la mandataria estatal en diversas ocasiones para escuchar de ella lo que Sonora necesita.

Mientras tanto, todos están expectantes a la entrada del nuevo gobierno, impacientes por la salida de Peña Nieto, esperanzados por el cambio y conscientes de que las cosas serán distintas de ahora en adelante.

Gracias por leer estos párrafos.